viernes, 5 de junio de 2009

VIVENCIAS REFERIDA PARA UNA NALISIS CRITICO Y CRITICO REVOLUCONARIO DEL PROFESOR Y CATEDRATICO UNIVERSITARIO RAFAEL JIMENEZ


POR: JOSE FELIX
Vivencias Referida, Apuntes para un Balance Autocrítica y Critico Revolucionario es un viaje que une el transito de una aventurezca iniciación de cultivos de valores y sentimientos patrióticos revolucionarios que marcaron las vivencias del profesor y catedrático Rafael Jiménez. En este trabajo autocrítico en donde se resalta la formación del autor desde sus primeros años en el sur profundo específicamente en Duberge, junto a sus familiares y amigos de quienes recibió desde muy temprano las primeras semilla que con el tiempo y poco a poco se fermentarían con la levadura del conocimiento y al experiencias vividas para ir acumulando un sentimentalismo revolucionario en pro del bien de la patria de Duarte.

Este es un trabajo que mezcla los recuerdos y los acontecimientos que marcaron la vida del autor entremezclado de forma cronológica con la historia vivida por le pueblo Dominicano desde el ajusticiamiento del tirano hasta el desembarco del coronel Caamaño: siendo el otrora director ejecutivo del Centro de Producción y Entrenamiento Audiovisual (CEPES), un protagonista y parte de una generación heroica que “encontraba la sabia que iluminaba la conciencia nacional en búsqueda de alternativas de justicia social y libertad sin temor a la muerte” en una época que en definitiva ha sido la mas oscura en la vida de los dominicanos desde la dictadura de los 30 años.

En esta obra, las añoranzas del autor por su tierra natal, los sueños revolucionarios, Los recuerdos de la nueva banda de música, el grupo de scout, la revueltas estudiantiles y la rebeldía ente la inescrupulosas violaciones a los derechos humanos, se conjugan con las corrientes de revolución que trillaban los senderos de Latinoamérica y del Caribe en los años que nos anteceden.

Sentimientos de los cuales nuestro pueblo no escapo, sino, mas bien adopto como suyo en aras de bien común y la paz de los Dominicanos que incansablemente propugnaban por el retorno a la constitución del 1963, depuesta por el imperialismo Yanquis y la oligarquía remanente del trujillismo en el país, ya que chocaba con sus intereses personales; además de que no les interesaba que un hombre que habla de principios, que define a la democracia como un bien común, que tiene profundo sentido de la dignidad humana gobernase la nación de Gregorio Luperon, sino que querían un presidente que promoviera y permitiese los privilegios, el robo, la persecución y la tortura.
Estos hechos de carácter históricos todos los conocemos, de eso estoy seguro, pero lo conocemos desde una perspectiva quizás condicionada por las autoridades que en un momento determinado han gobernado el país: pero conocemos muy poco desde la perspectiva de vivencias referida por los mismos jóvenes que sin miedo a las persecuciones policiales por el gobierno de turno que se autodenominada que ni de injusticia ni privilegios, se entregaban en cuerpo y alma a las luchas y revoluciones tantos civiles así como estudiantiles aferrados a sus objetivos de enfrentar las brutalidades policiales y de la autodenominada banda colora, la intolerancias del gobierno, la represión y a los sin números de crímenes y asesinatos a dirigentes revolucionarios en toda la geografía nacional.

Es en este escenario donde se produce un Balance Autocrítico y Critico Revolucionario donde se cuestiona la forma en que dentro de las mismas organizaciones que pretendían una democratización del sistema político de los Dominicanos no habían formas de cómo conciliar las distintas visones que cada grupo poseía sobre tal proceso; puesto que unos propone que la solución a la salida del régimen es la táctica del golpe de estado revolucionario; otros entendían que la solución era la instauración de una dictadura con respaldo popular propuesta por le profesor Bosch. Y ahí estuvo el autor (Rafael Jiménez), en medio de una coyuntura que políticamente garantizaba la instauración de la dictadura con respaldo popular en busca de una salida estratégica que requería la crisis social y económica que afectaba a los Dominicanos.

Durante este proceso los que participaban y creían en las movilizaciones populares, se convirtieron en obstáculos para la ejecución de ideas políticas de un sector de derecha y corrían el riesgo de que ser acecinados por el cuerpo represivo del sistema de gobierno, un sistema “ afectado de un cáncer entropico responsables de las desigualdades sociales que reaparecen en un recorrido cíclico como manifestaciones de crisis políticas. Crisis que nunca terminaran hasta que no se eliminen las causas históricas que lo determinan.

Son las convicciones revolucionarias las que animan al hoy catedrático de la Escuela de Comunicación Social de la UASD, a mantenerse en pie de lucha hasta las ultimas consecuencias, sin temor a nada ni nadie, y les impregnan fuerzas necesarias para sumarse a otros miles que compartían los mismos ideales bajo los lineamiento de una fuerza política que confiaba que si los denominados hijos de machepas podían tener una mejor calidad vida enmarcadas por los senderos de la verdadera democracia.

Esta aportación Critico Revolucionaria viene a ser una chispa que busca revivir en cada ciudadano y principalmente a los estudiantes Uasdiano, la pólvora revolucionaria que esta dormida en muchos. Pero no una revolución basada en armas. sino mas bien en las investigaciones y la adquisición del conocimiento, de ideales aptos para la nueva era. Se pretende que cada lector de estas vivencias, rebusque en lo mas profundo de su ser y experimente la decisión de ser irreverente antes los atropellos y maltratos que aun en nuestros días seguimos viviendo porque como dice el autor “ la mejor forma de conocer lo que somos hoy es estudiando lo que fuimos ayer, pues lo que somos hoy, salió de lo que fuimos ayer”.

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